martes, 2 de junio de 2009

Puno Moribundo



Las frágiles miradas de niños atrapados en el frio cuasi ártico de Puno se despiden inmutados por la indiferencia de la mayoría de nosotros quienes estando y portando una condición superior a la que les toco vivir, solo nos queda en el mejor rabiar de los casos sollozar de impotencia por tan graves crímenes contra la ciudadanía. Afirmo “crímenes”, pues como en aquel lobby cibernauta de un amigo en el que tilda de criminales a aquellos que enseñoreándose se los medios necesarios para palear la pobreza y al ignorancia de la población, vigilan airadamente desde sus lujosas cabañas en lo alto del poder factico, para que este status Quo permanezca en su favor, se configura palmariamente estas nada nuevas formas de cometer crímenes dentro y a partir de las estructuras del poder del estado. Las cifras de las autoridades burguesas de este gobierno corrupto señalan ya más de 140 muertes de niños en las caleras de puno.

Otros tantos padecen crónicas infecciones respiratorias como consecuencia del frio infalible en aquella zona de nuestro país. Aquí en la capital los mediocres argumentos de las autoridades de los Ministerios de Salud y Educación no dejan de signar culpa a los estamentos regionales indicando que dichas regiones cuentan ya con solvente patrimonio designado para hacer frente a tan duras condiciones de sobrevivencia; como si un fulano ordinariamente informado no conociera que a pesar de contar con fondos del erario público para emprender las distintas medidas destinadas a la protección social de determinado territorio debe ser primero autorizado y visado por la altas esferas de la burocracia oligarca entre ellas el Ministerio de Economía, franqueado por uno de los neoliberales mas indolientes del medio económico de este país. Desde sus elites solo saben sonreír y exhibir documentos sobre su inútil acción e inacción respecto a su proceder frente a nuestros hermanos del interior del país. Han montado un millonario espectáculo en torno al “foco infeccioso” de la influenza “porcina”, que a decir nuestro, encaja tan perfectamente en las panfletos y libretos que produce la gran productora de telenovelas del partido de Alfonso Ugarte; aunque esta vez, este teatro psicosocial provino de las más altas mentes neoliberales del mundo occidental a fin de desviar la atención de la comunidad internacional respecto a los grandes desgarros que viene sufriendo el capitalismo moderno. Hoy las autoridades Usamericanas declararon la bancarrota de una de las empresas más poderosas e iconos del Tío Sam, General Motors, que en la práctica devendrá en miles de despidos y un rescate financiero por más de 30,000,000 millones de dólares, que como siempre, serán desconocidamente auspiciados por el pueblo estadounidense.

Nos imaginaríamos que se podría realizar con basta suma de dinero aquí en Latinoamérica, si se destinase voluptuosa millonada a favor de las comunidades más precarias de este continente, en lugar de mantener en la lujuria a un grupo de familias que durante más de 200 años se han beneficiado de la inmensa plusvalía que genera el trabajo asalariado en la tierra prometida del reino lucrativo capitalista. No entendemos nuestra realidad, menos nuestra conciencia. Nos bombardean por todos los medios publicitarios que nuestra maquinaria productiva viene creciendo cual Japón luego de la segunda guerra mundial (La Razón, Correo, Expreso), y que nuestra democracia es una de las mas apoteósicas a nivel internacional; pero el inframundo de las clases bajas expresan todo lo contrario. Es inminentemente antagónico, cual sombra en un día sin sol. Las comunidades de Puno y Juliaca sufren la inclemencia de la total indiferencia del medio criollo gobernante. Esta situación climática, empeorada con la atomización del incremento de la temperatura del planeta, produce un foco infeccioso en la que cualquier ser humano con mínimas defensas debido a su tenue estado nutricional, en la que seguro más del 80% de la población rural presenta debido a los escasos recursos económicos que padece aunado por la inútil y falaz presencia del Estado en la satisfacción de las necesidades de una de las poblaciones más pobres del país. Ayer mientras emprendía el camino al descanso nocturno, entre imágenes impactantes y tenebrosas se apreciaba, en uno de los canales de señal local, en vivo y en directo la agonía y muerte de un niño de apenas 2 años de edad en Puno, una mirada y una voz dulce que era consumida por la vorágine de la muerte oscuro y muda. El holocausto para una madre, presenciar la muerte de su propia vida mediante la lejanía e inercia de un pequeño cuerpo en sus brazos. Al Ministro de Salud no se le ocurrió mayor astucia que demandar una investigación a las autoridades de Puno pues según su bruta concepción de la realidad social serrana, esta comunidad ya cuenta con recursos necesarios para emprender las medidas que a palabra de su propia complaciente percepción, no se corresponde para nada ni siquiera en realizar visitas in situ, como cualquier ser humano doliente para constatar objetivamente las circunstancias a un paso de la muerte de aquella ciudad.

Me imagino a un Alan García, empotrado en un buen sillón de cuero en Palacio, arropado por anchas vestimentas de lana y casimir, influenciado por la calentura aquella cónyuge argentina, que haciendo uso de ese sentimiento reciclado llamado caridad, justifican su desprecio por los verdaderos fundadores de esta nación, con sendas practicas de oratoria de disfunción mental empuñando la voz a partir de “llevaremos ropas y comida”, pero ¿y la igualdad?... Quizás para el próximo gobierno, aquí solo se atienden las demandas de los Prado, Los Brescia o Los Romero. Ellos si tienen para pagar un cupo en la alta sociedad que se atiende en clínicas privadas de Nueva York, Canadá o Suiza.

Han diferentes organizaciones, instituciones y ONGs que vienen acopiando material de ayuda para nuestro hermanos moribundos y olvidados del interior del país. Apúntense.

1 comentario:

Unknown dijo...

...una pregunta que me hago es si habrá olvidado el presidente de tomar en cuenta todo esto para establecer su tan pobremente maquillado índice de pobreza.., seguro que sí...

Es obvia la indiferencia del estado frente a todo esto, las muertes de todos los niños hasta ahora no es motivo para sensibilizarse según el grasoso cerebro del presidente, ...cuántas más sr. presidente..., muxas ya que ahora la prioridad la tienen otros, pues en este país si muere un pobre a pocos les importa. Y su tan solidaria esposa hará algo o estará "sembrando" más de sus mentiras sobre su tan solidaria organización. Para ellos el Perú está creciendo...ja!